La galleta de limón es un pilar de la gastronomía cordobesa. También le dicen galleta de soda, porque al prepararla en la mesa o superficie donde se ubican, antes de asarla, se esparce bicarbonato de soda.
Asimismo, la llaman galleta de limón, porque en su preparación se le aplica cáscara de limón criollo rayado.
Estas galletas son las protagonistas de las carreteras de Sucre, Córdoba y parte de Bolívar.
Su sabor es inigualable, pues el paladar no suele definir si ha comido más leche que anís, limón, o azúcar.
Esta galleta artesanal nunca pasa de moda pues sigue aferrándose a las familias que a diario la consumen, incluso muchos la asocian con grandes historias o anécdotas de la niñez.
¿Qué anécdota recuerdas?