En las últimas horas la Procuraduría General de la Nación informó que el exalcalde de Bucaramanga y excandidato presidencial, Rodolfo Hernández, tiene varias sanciones disciplinarias que le impiden ejercer cargos públicos hasta el año 2026.
Esto quiere decir, que el ingeniero queda inhabilitado para participar de las próximas elecciones territoriales que se llevarán a cabo en el mes de octubre.
Hernández no podrá aspirar a la gobernación de Santander, debido a que la ley establece que aquellos funcionarios sancionados en más de tres ocasiones en los últimos cinco años automáticamente quedan inhabilitados para ejercer cargos públicos por tres años en los casos en los que la última sanción sea inferior a ese término
La primera sanción fue interpuesta en 2018 por golpear a Jhon Claro, exconcejal de Bucaramanga; la segunda por llamar “lavaperros de la politiquería” a Fernando Martínez, veedor ciudadano, y la tercera por maltratar a un funcionario de la Secretaría de Infraestructura a quien calificó de corrupto.
La Procuraduría buscó ratificar estas sanciones luego de que el abogado Duarte Ballesteros hiciera una petición para revocar la candidatura de Hernández a la gobernación de Santander. En la petición se argumenta que el ingeniero “ha sido sancionado por parte de la Procuraduría General de la Nación en varias oportunidades, como lo establece el certificado emitido por la misma entidad en su página web”.
Ahora, el certificado especial de antecedentes de la Procuraduría será trasladado al Consejo Nacional Electoral (CNE) que es el tribunal competente para decidir si revoca o no la inscripción de la candidatura de Rodolfo Hernández. Mientras tanto, la Procuraduría se mantiene firme en que el candidato debe permanecer inhabilitado.