Secta evangélica que ayunó para ‘ver a Cristo’ ya lleva más de 400 muertos

Secta evangélica que ayunó para ‘ver a Cristo’ ya lleva más de 400 muertos

La ‘masacre de Shakahola’ sigue cobrando vidas en Kenia, este es el nombre del bosque en donde se reunía una secta evangélica a practicar ayunos extremos con el objetivo de encontrarse con Dios.

Actualmente el número de muertos ha aumentado a 403 después de que se descubrieran 12 nuevos cuerpos, así lo informó una funcionaria de la región.

«Nuestro equipo medico-legal pudo exhumar 12 cuerpos hoy» lunes, declaró a la prensa la prefecta de la región de la costa, Rhoda Onyancha, quien añadió en un mensaje a la AFP que el «balance total» es «de 403 muertos».

Según información de medios internacionales, el número de rescatados con vida se mantiene en 95. Asimismo, 613 personas han sido reportadas como desaparecidas hasta el momento y se han recogido cerca de 260 muestras de ADN de posibles familiares para averiguar la identidad de los muertos.

Las pesquisas iniciales indican que la mayoría de los cuerpos exhumados pertenecen a fieles de la Iglesia Internacional de la Buena Nueva (Good News International Church), una secta evangélica liderada por el autoproclamado pastor Paul Nthenge Mackenzie. Este ex taxista, ahora bajo custodia desde el 14 de abril, promovía el ayuno hasta la muerte para «encontrarse con Jesús» y enfrenta cargos, entre otros, por «terrorismo».

Las autoridades kenianas iniciaron el pasado lunes la cuarta fase de exhumaciones de las tumbas y fosas comunes encontradas en el bosque de Shakahola, en el condado costero de Kilifi.

Casi todos los muertos de la «masacre de Shakahola» han sido exhumados de tumbas y fosas comunes en ese bosque, a excepción de unos pocos que murieron en el hospital por su estado grave.

El pasado 27 de junio, el patólogo jefe del Gobierno, Johansen Oduor, indicó que, de los 338 cuerpos examinados hasta esa fecha, 117 eran de menores y 201 de adultos, mientras que 20 se encontraban en un estado de descomposición demasiado avanzado para determinar la edad.

Las autopsias de más de un centenar de cuerpos evidenciaron que, si bien todos mostraban signos de inanición, los cadáveres de al menos tres menores y un adulto tenían también rastros de estrangulación y asfixia.