En las redes sociales se pueden ver todo tipo de historias, sin embargo, no todas resultan ser ciertas. Así es el caso de una influenciadora taiwanesa, quien se hizo conocida mundialmente como MianBaobao.
La mujer, contó su lamentable historia por medio de sus perfiles en las diferentes plataformas, afirmando que fue diagnosticada con cáncer de páncreas en etapa avanzada. Al menos, esa es la versión que dio sostuvo durante tres años a sus familiares, allegados y seguidores en línea.
Desde ese momento, la mujer ‘se creyó el cuento’ y empezó a subir fotografías en el hospital, registros de sus supuestos tratamiento contra la enfermedad con el hashtag cancerfightingdaily y rutinas de entrenamiento diario.
Ella para sus seguidores era un ejemplo a seguir, una mujer disciplinada, valiente y que no se dejaba ganar por las adversidades.
En la descripción de su perfil de Instagram, MianBaobao escribió: «Una mujer que aspira a ser una atleta de levantamiento de pesas no profesional y una luchadora profesional contra el cáncer».
Sin embargo, aunque su falso testimonio fue creído durante varios años por sus seres queridos y seguidores, en mayo del presente año, la fachada comenzó a caerse, ya que su exesposo reveló detalles que ponían en duda su historia de lucha y resiliencia contra el cáncer.
De acuerdo con su relato, la creadora de contenido insistía en ingresar sola al hospital cada que iba a recibir tratamiento y lo mismo ocurría cuando tenía que hablar con los especialistas.
Según información que dio el hombre a diferentes medios de comunicación “Nunca vi a ningún médico tratante, prueba de diagnóstico o recibos de hospital de ella en los últimos dos años”.
Las declaraciones del exesposo de la influenciadora crearon todo un caos, ya que las autoridades asiáticas iniciaron una investigación y se dieron cuenta de que en realidad las imágenes en las que MianBaobao mostraba su pérdida de cabello, máquinas de rayos X y hemorragias nasales eran una invención. De hecho, eran fotografías sacadas de internet.
Una vez salió a la luz la cruel verdad, la creadora de contenido taiwanesa no tuvo más opción que eliminar todas sus publicaciones de Instagram y confesar su engaño.
“Mentí sobre tener cáncer y engañé a todos durante tres años. Sé que merezco morir mil veces y debo asumir las consecuencias de mis propias elecciones”.
Finalmente, expresó su arrepentimiento: «A todos los miembros de la familia, amigos, fanáticos e internautas que se preocuparon por mí, me apoyaron y me animaron, quiero disculparme».