Por los delitos de tortura, usurpación de funciones públicas y prevaricato, entre otras presuntas conductas delictivas, Andrés Escobar, el hombre que quedó registrado en videos disparando contra los manifestantes en el sector de Ciudad Jardín, sur de Cali, el pasado 28 de mayo, igual que 17 personas más que se vieron involucradas en los hechos, fueron llamados por la Fiscalía para imputación de cargos.
En su momento, Escobar explicó que el arma con la que fue grabado era traumática y lo que estaba haciendo era defender el sector de las personas que se encontraban vandalizando.
«El que nada debe, nada teme. Yo la verdad con eso estoy tranquilo porque penalmente no tienen nada», dijo Andrés Escobar en entrevista con medios nacionales.
En las calles de la ciudad, Escobar fue tildado de paramilitar a través de grafitis y pasacalles en los que, además, exigen sea enviado a la cárcel.
«Eso no me preocupa porque es la forma de actuar de la izquierda todos los días y actúan desde distintos frentes para desfigurar la realidad. Invierten los valores y los significados porque, según su lógica, si usted pide seguridad apoya a las autoridades y trabaja por el bienestar de su familia, entonces es un delincuente y merece una condena y al mismo tiempo justifican al que bloquea, al que destruye los bienes públicos y atenta contra la integridad de las personas para reclamar sus derechos», agregó Escobar.
Escobar sería imputado junto a otros civiles por supuestamente cometer varios delitos durante las jornadas de protesta.
La fecha de la imputación de cargos está por confirmarse.