Al paso que el panorama electoral se iba esclareciendo con los resultados de las votaciones de este domingo 27 de octubre, el senador Álvaro Uribe, reconoció su derrota en las urnas que definían alcaldes, gobernadores, diputados, concejales y ediles.
«Perdimos, reconozco la derrota con humildad. La lucha por la democracia no tiene fin», fue la frase que expresó el jefe del Centro Democrático.
Las mayores pérdidas de Uribe se vieron en las alcaldías de Bogotá y Medellín. En la capital del país Miguel Uribe se ubicó con la cuarta votación y el otro candidato que apoyaba a la Alcaldía de la capital antioqueña, Alfredo Ramos, quedó de segundo, dejando como líder a Daniel Quintero Calle.
Incluso a nivel de gobernación tuvo estruendosas derrotas, tal como ocurrió en Córdoba, departamento que es considerado territorio uribista. El triunfo fue para Orlando Benítez del partido liberal, quien derrotó aplastantemente a Carlos Gómez.
El expresidente solo logró triunfos en las gobernaciones de Casanare, con Salomón Sanabria, y de Vaupés, con Eliécer Pérez.
Según el politólogo Jairo Libreros, citado por el diario El Tiempo, la derrota del uribismo se debe al malestar frente a la administración de Iván Duque.