El alcalde de Cali, Maurice Armitage, decretó el toque de queda en la ciudad debido a los actos de vandalismo que se han registrado durante las movilizaciones del paro nacional.
Armitage aseguró que, el objetivo principal de esto se debía a que una serie de desadaptados y delincuentes están asaltando a personas y negocios.
La medida se tomó hacia las 3:00 de la tarde, teniendo en cuenta los distintos hechos de orden público registrados en la capital vallecaucana. Según Armitage, el decreto comenzará a partir de las 7:00 de la noche y se mantendrá por “tiempo indefinido”.
Asimismo, el alcalde aseguró que aseveró la violación de esta medida traerá como consecuencia la detención: «A partir de esa hora ningún ciudadano puede estar en la calle pues será detenido».
Finalmente, el mandatario aseguró que esta medida ya fue consultada con el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo quien la avaló.