Si Uniaguas no mejora la prestación del servicio de agua potable en los municipios de Cereté, San Carlos, Ciénaga de Oro y Sahagún sus días podrían estar contados, pues la interventoría lo calificó como pésimo.
Así se desprende de una nueva reunión que se llevó a cabo entre la empresa interventora del contrato que es Eras, la Contraloría de Córdoba y los alcaldes de los cuatro municipios.
El vocero de la interventoría ratificó que el agua no llega con regularidad a las poblaciones señaladas y que no hay garantías de la potabilidad del agua que consumen los usuarios.
Además de lo anterior denunciaron que Uniaguas tiene una deuda con la empresa interventora, debido a que no le cancelan las cuotas de supervisión establecidas, lo cual indica decir que la labor de supervisión tampoco se está haciendo.
Ante esa situación, el contralor departamental, Emilio Otero Dajud, dijo que seguirán adelante con las acciones por parte de la entidad que tiene a cargo, con el fin de contribuir a una solución definitiva a la situación que afecta a los habitantes de cuatro municipios del medio Sinú.
Entre las acciones que emprenderá el organismo de control está la realización de pruebas de laboratorio para verificar la potabilidad del agua que están suministrando a los usuarios, puesto a que hay denuncias de los alcaldes y de los usuarios sobre malos olores en el agua que llega a los hogares de las familias que habitan en los municipios donde opera Uniaguas.