Aún consternada por lo sucedido recuerda que una vez ocurrido el accidente, el carro se sumergió completamente hasta el fondo del río Sinú, en ese momento con su bebé en los brazos Sandra Milena Andrade Alean, de 37 años de edad, señala haber alzado a su pequeño hijo, y en las profundidades le clamó a Dios por un milagro para ella y para su bebé de tan solo cuatro meses.
«Dios no me dejes morir, esta no es la manera de morir mi hijo y yo, hazme un milagro» señala la mujer que aún permanece en el área de urgencias del Hospital San Diego de Cereté.
Dice que iba en la parte delantera del vehículo cuando ocurrió el accidente, que una vez en el fondo y después de clamar a Dios sintió que algo o alguien la empujaba hacia la superficie.
«Yo tenía a mi bebé a quien había alzado por un bracito, la corriente nos arrastraba», relata mientras deja escapar un llanto de agradecimiento al creador. » No me va a creer, yo no sé nadar y estábamos en el fondo, recuerdo pasó bastante rato y no se que pasó, en ese momento alguien se lanzó , pero ya algo me había empujado como tratando de sacarme a coger aire, y yo seguía alzando a mi hijito, entonces rescataron a mi bebé». agregó aturdida la madre del menor.
El conmovedor relato de Sandra advierte un milagro de vida, un milagro que según ella Dios le cumplió, y aunque no ha podido ver a su bebé está consciente que el milagro que recibió le va a cambiar la vida.
«Esto es algo que me va a cambiar la vida aveces uno necesita que le pasen las cosas para valorar la vida, las cosas, no sé, pero esto es algo que me va a cambiar la vida.» Aseguró.
Recuerda que fueron eternos los momentos debajo del agua y que había mucha angustia porque fueron varias las personas que quedaron dentro del vehículo.
Acerca de cómo sucedieron los hechos dice que realmente no sabe qué pasó, pero que recuerda que el vehículo estando sobre el planchón se fue hacia la parte de atrás sobrepasando las «cuñas» que lo aguantaban y terminando en el fondo del río Sinú.
Ahora solo espera recuperarse y tener nuevamente a su bebé en sus brazos quien también es atendido en el centro asistencial.
Como se sabe a las 7 de la mañana de este martes, un vehículo tipo campero conducido por Uriel Andrade Vergara, que cubría la ruta de transporte de pasajeros del corregimiento de Severá hacia el casco urbano de Cereté, se fue al río Sinú.
El hecho ocurrió en el planchón la Esmeralda, ubicado en la vereda de ese mismo nombre, cuando el vehículo con varios pasajeros a bordo fue a parar al río. En el accidente perdieron la vida tres mujeres, dos de ellas adultas mayores identificadas como Manuela Madera, Dominga Guerra y la joven Ana María Jiménez Padilla quien se encontraba en estado de embarazo.