En horas de la mañana de este martes 5 de septiembre, el corrupto exsenador Musa Besaile fue trasladado desde la ciudad de Montería hasta Bogotá bajo estrictas medidas de seguridad, para comparecer ante la Corte Suprema en el nuevo proceso en su contra relacionado con corrupción en contratación en el departamento de Córdoba.
El exsenador, quien fue condenado por nexos con paramilitares, por el gigantesco caso de corrupción de Odebrecht, también involucrado en el escándalo del Cartel de la Toga, ahora aceptó cargos por el escandaloso caso del Cartel de la Hemofilia, acogiéndose a sentencia anticipada por concierto para delinquir agravado, peculado por apropiación y contrato sin requisitos legales.
En dicho caso, se inventaban pacientes con esa enfermedad para cobrar el servicio de salud y cuyo monto del fraude superaría los 54 mil millones de pesos.
Este escándalo que compromete como principales actores a los exgobernadores Alejandro Lyons y Edwin Besaile, hermano del congresista Musa, fueron ellos los que coordinaron la matriz de corrupción, pero nada de esto se hubiera concretado sin la intervención de Besaile quien hoy se acogió a sentencia anticipada.
Según consta en el acta de formulación de cargos, en el marco de la contienda electoral para la elección de los alcaldes y gobernadores para el periodo constitucional 2012-2015, Musa Besaile y Alejandro Lyons, quien en la época era candidato para la Gobernación de Córdoba, conformaron una alianza criminal para desviar recursos del departamento, en beneficio propio.
“Los recursos que presuntamente fueron robados provenían del Sistema General de Participaciones. En ese contexto, de acuerdo con la investigación, Musa Besaile y Alejandro Lyons, supuestamente, con la ayuda de terceros, usaron registros fraudulentos de supuestos pacientes con hemofilia para, una vez se aprobaron los pagos por esos procedimientos, usar esos recursos para realizar pagos irregulares”, señalan desde la Corte Suprema de Justicia.