En las últimas horas han ocurrido varias cosas en Colombia que han dejado a toda la comunidad sin palabras, la primera fue la aparición de los cuatro niños perdidos en la selva del Guaviare y la segunda y lamentable noticia, fue la muerte del coronel de la Policía Óscar Dávila Torres, uno de los investigados en medio del escándalo por el uso del polígrafo y llamadas chuzadas a Marelbys Meza, exniñera de la ex jefa de gabinete del presidente Gustavo Petro, Laura Sarabia.
Según las primeras versiones, el coronel falleció en horas de la tarde de este pasado viernes, en la calle 22 bis n.º 48-40, en el sector de Teusaquillo, a pocas cuadras de la Fiscalía, y en la puerta principal del conjunto residencial Prados de El Salitre, quedó parqueada la camioneta Nissan Frontier, FWX914 en la que se movilizaba el teniente.
Así mismo, se conoció según fuentes oficiales de las autoridades, que Dávila Torres en ese momento iba acompañado de su escolta, sin embargo, se detuvo en el carro y le pidió al hombre de seguridad el favor de comprarle una botella de agua.
Posterior a eso, el escolta regresó al auto y se encontró al coronel sin vida y con un impacto de bala, por lo que las primeras versiones indican que pudo ser un suicidio.
Es importante mencionar que Dávila era nada menos que el jefe de la sala de anticipación, encargada de la seguridad del presidente Gustavo Petro, y habría sido quien, por órdenes superiores, debía recuperar el dinero de Sarabia a como diera lugar.
Sin poder hacer otra cosa, dispuso usar el polígrafo con la niñera Marelbys para determinar si ella se lo había robado.
Un detalle importante de este misterioso caso es que se conoció un documento del pasado 2 de junio, en donde el oficial solicitó ser escuchado por la Fiscalía, y advertía que era el coordinador de Protección Anticipada de la Presidencia de la República.
Finalmente, el vehículo color plata y de placas de Manizales, empezó a ser inspeccionado por miembros del CTI, luego de que se encontrara en su interior el cuerpo del oficial.