Después de estar cuatro días fuera de su casa, Michelle Lespron, una abogada de lesiones personales que vive en Tuscon, Arizona, se llevó tremendo susto tras intentar utilizar su baño y encontrarse con una aterradora sorpresa.
En la casa de la mujer, ubicada en Catalina Foothills, ingresó una tenebrosa serpiente negra de gran tamaño y según su versión, ella levantó la tapa y se dio cuenta que el animal estaba “acurrucado”.
De inmediato, la mujer se contactó con una empresa que está especializa en retirar este tipo de “visitantes” de las viviendas, ya que su papá intentó hacerlo y no lo logró.
Quien estaba manipulando a la serpiente comentó que esta medía entre 3 y 4 pies de largo. Además, Bryan Hughes, propietario de la compañía, comentó que no es la primera vez que encuentran una serpiente látigo en una casa.
También escribió en su página de Facebook lo que sucedió: «Llamaron a Nikolaus a una casa para atrapar lo que llamaron como una serpiente de cascabel vista en el baño».
«Estas serpientes pueden ingresar a la tubería a través de bóvedas en sistemas sépticos, arrojarse desde otras casas y una variedad de otras situaciones», agregó.
Por otro lado, es importante mencionar que afortunadamente para la estadounidense, la especie no es venenosa
Lespron le dijo a CBS News que, después de que la compañía sacó la serpiente, todavía tuvo que usar su baño de invitados durante tres semanas antes de sentirse lo suficientemente cómoda como para volver al suyo.
Fuente consultada El Tiempo.