En Springfield, Colorado, los agentes de policía presenciaron una escena insólita que les costó creer, pues un hombre en estado de embriaguez notó que las autoridades estaban cerca y decidió cambiar de asiento con su perro para no ser arrestado.
El caso fue informado por el Departamento de Policía de Springfield por medio de su cuenta de Facebook, señalando que a eso de las 11:30 p.m., un agente de policía detuvo un vehículo que viajaba a 52 millas por hora en una zona de 30 millas por hora.
Al momento del policía acercarse al vehículo, el conductor cambió de asiento con su perro, el cual llevaba en el lado del pasajero.
“El hombre salió del vehículo del lado del pasajero y afirmó que no conducía”, declararon en el reporte de policía.
El hombre al parecer mostraba claros signos de intoxicación y uando le preguntaron si había tomado alcohol, salió huyendo del lugar.
Sin embargo, no pasó mucho para que las autoridades lo capturaran de nuevo, pues fue detenido a 20 metros de los vehículos.
Tras la captura, el Departamento de Policía confirmó que el hombre tenía dos órdenes activas para su arresto.
Según informó la Policía, lo trasladó al hospital y luego a la cárcel por las dos órdenes encontradas y la infracción cometida.
Finalmente, la policía añadió entre broma, “El perro no se enfrenta a ningún cargo y le dejamos ir con solo un aviso”.