“Hasta que la muerte los separe” es la frase que se escucha a menudo en las bodas y aunque algunos la tomen como palabras al azar, muchas personas se la toman en serio.
Así es la historia de un abuelito que fue visto en varias ocasiones llegando hasta un cementerio ubicado en Tamaulipas, México, llevándole flores a su esposa.
Este acto sin duda le conmovió el corazón a mas de uno y según los habitantes del sector, esta no era la primera vez que el ancianito hacía esto, pues cada día de la madre visita a su mujer sin falta, desde que había fallecido.
Sin embargo, la emoción y ternura que causó se convirtió en tristeza, cuando se conoció que había fallecido días después.
Don Aniceto Colunga, de 84 años, desapareció aquel 10 de mayo causando temor en su familia, quienes iniciaron la búsqueda de inmediato.
A través de Facebook, su nieto publicó la foto para que se difundiera y ayudaran a dar con su paradero, en esta se lograba observar al señor en su bicicleta y un ramo de flores en sus manos.
Sin embargo, el 13 de mayo, el mismo nieto confirmó la muerte del hombre. “Muchas gracias a todos los que se unieron a la búsqueda de mi abuelo, los que compartieron para facilitar encontrarlo, gracias de todo corazón, ahora mi abuelo ya se reunió con mi abuelita en el cielo, nos duele mucho su partida nos deja un enorme dolor, pero nos quedamos con todo ese cariño esas anécdotas que nos contaba de dónde andaba trabajando en el ferrocarril te vamos a extrañar abuela. QEPD Aniceto Colunga, la mera punta del tren”, indicó el joven.
Aunque se desconocen las casusas de su muerte, lo cierto es que no solo en el sector, sino en varios países lo recuerdan con mucho amor y ternura por haber acompañado a su gran amor hasta los últimos días de su vida.