La espada del libertador Simón Bolívar tuvo un inesperado protagonismo en la ceremonia de posesión del presidente Gustavo Petro, pues traerla fue la primera orden que impartió el mandatario luego de recibir la banda presidencial.
El presidente electo esperaba recorrer con la espada el camino hacia su investidura, sin embargo, el sábado el expresidente Iván Duque, decidió negarle el pedido a su sucesor, aduciendo “razones de seguridad”.
De esta forma se presentó un receso de 10 minutos durante la ceremonia, mientras llevaban la espada al evento cuatro soldados del Batallón Guardia Presidencial, quienes ingresaron por la entrada de la carrera séptima portando la urna de cristal con la espada de Bolívar en su interior.
“Llegar aquí junto a esta espada, para mí, es toda una vida, una existencia. Quiero que nunca más esté enterrada, quiero que nunca más esté retenida; que solo se envaine, como dijo su propietario, El Libertador, cuando haya justicia en este país”, manifestó Petro.
Asimismo, el presidente señaló que, la espada tiene tanta historia que sumará una más y es porque se demoró en llegar a la plaza.
Por su parte, la coordinadora de comunicaciones del acto de investidura, Marisol Rojas, aseguró que, la actitud caprichosa de Duque los dejó sorprendidos por su negativa para prestar la espada al acto protocolario de la transición de mando del presidente electo.