José Rafael Rivera debía cumplir un compromiso a tempranas horas de este lunes en la ciudad de Cartagena por lo que llegó en horas de la noche del día anterior, de su natal Venezuela, donde trabajó por 20 días.
El ingeniero mecánico, de 58 años, llegó a un local en la Transversal 26, entre la sucursal de Megatiendas del Mercado de Bazurto y la Avenida del Lago, a cumplir su cita de trabajo lo que nadie pensó es que la muerte se cruzaría por su camino.
El hombre adelantaba un proyecto que lo llenaba de mucha ilusión, se trata de su empresa Glacial del Norte, donde se fabrica hielo.
Tras llegar al lugar, empezó a manipular una máquina que estrenaban, al parecer, le aplicó amoniaco a un cilindro de la máquina, sin embargo, olvidó abrir una válvula, por lo que un gas quedó comprimido y el cilindro explotó.
En un principio se pensó que la explosión era productos de las protestas que realizan los mototaxistas, no obstante, cuando vecinos del sector salieron de sus casas se toparon con la espantosa escena.
En la mitad de la calle estaba uno de los brazos de José Rafael y el resto de su cuerpo se encontraba esparcido entre la terraza y la parte interna del negocio.
A los pocos minutos llegaron los bomberos para controlar la emergencia, que alertó a todos en la zona.
En el negocio se encontraban otras personas, que resultaron ilesas, excepto el de la víctima que llevado de inmediato a un centro médico y Luis Barrios, un trabajador.