Una olla de corrupción se estaría cocinando en la Alcaldía de San Bernardo del Viento

Una olla de corrupción se estaría cocinando en la Alcaldía de San Bernardo del Viento

Un entramado de corrupción estaría presentándose en la Alcaldía de San Bernardo del Viento, pues estarían valiéndose de artimañas para sacar del cargo a la asesora de Control Interno.

Al parecer, la mujer se estaría convirtiendo en la “piedrita en el zapato” de muchos funcionarios de la Alcaldía, pues debido a la función que cumple ya ha reportado algunas inconsistencias e irregularidades que se han presentado al interior de la actual administración.

Por lo anterior, hay quienes pretenden apartarla del cargo, sin importar que, de hacerlo, estarían actuando en contra de la ley, ya que, de acuerdo con lo legalmente establecido, ella debe llevar a cabo sus funciones por un periodo de cuatro años.

Sería tanto el interés de la Alcaldía municipal en sacar a la asesora de control interno que ya adelantan contra ella un disciplinario, inclusive este medio conoció que, en muchas ocasiones le han hecho ofrecimientos de dinero con tal de “quitarla de camino”.

Es de resaltar que, la mujer ha auditado contrataciones de mínima cuantía realizadas el pasado mes de diciembre, las mismas que han arrojado como resultado preocupantes irregularidades.

Por otra parte, se estableció que algunos funcionarios fueron nombrados sin cumplir todos los requisitos del perfil exigido, hecho que habría quedado en evidencia en la rendición de cuentas de la Alcaldía en cabeza de Mauro Oliveros.

Como se recordará, una situación similar le ocurrió a Yiseth Cárdenas Fajardo, quien también venía de la administración pasada y tuvieron que restablecerle sus derechos luego de sacarla.

Es de recordar que, un juez ordenó cinco días de arresto contra el alcalde Mauro Oliveros, argumentando la violación de derechos constitucionales de la funcionaria en mención.

Finalmente, la situación expuesta no solo se presentaría en la Alcaldía sino también en el hospital local, donde restablecieron los derechos de un joven que habían despedido para, al parecer, llenar la cuota política.