Una situación escalofriante se presentó en el municipio de Momil, Córdoba, donde parece no haber temor a Dios.
En el cementerio de esta localidad, personas sin escrúpulos y sin respeto por los muertos, profanaron la tumba de un bebé, un caso que ha generado repudio entre los habitantes.
Todo parece indicar que, en días pasados, un grupo de personas, sacó el cuerpo del niño y usaron el cajón para montarle a una mujer un ensalmo maligno.
Las intensiones oscuras y malignas, quedaron expuestas por el insoportable olor a mortecina, pues para hacer sus ritos satánicos rompieron una bóveda para colocar sangre, lazos, una pañoleta, ropa interior y una cadenita dentro de una urna amarilla con blanco.
De acuerdo con una fuente vecina al cementerio, ese día no logró conciliar el sueño porque se escuchaba el fuerte golpe de un martillo en el campo santo, y tras el amanecer se sintió un fuerte hedor, pero solo varios días después, entraron y encontraron un cajón escondido entre la maleza.
En el ataúd debían reposar los restos del bebé, sin embargo, en su lugar estaba un ensalmo, según entendidos de este tipo de actos, quizá para tratar de impedir que alguna mujer quede embarazada.
Lo ocurrido fue denunciado y hacen un llamado para que se ejerza vigilancia en el cementerio, que se mantiene solo y sin ningún tipo de control.