Se abrió investigación disciplinaria y penal a varios uniformados por su actuación en el caso que derivó en el homicidio de un niño de 12 años y un joven de 18, en zona rural de Tibú, Norte de Santander el pasado 8 de octubre.
Las denuncias que varios pobladores han realizado con relación a la reacción tardía de los oficiales de Policía para llegar al lugar donde la comunidad había retenido los jóvenes, tras encontrarlos hurtando y entregarlos a las autoridades, han sido tenidas en cuenta para la diligencia investigativa que se adelanta.
El caso se registró el pasado viernes, cuando al parecer, los jóvenes de origen venezolano, fueron sorprendidas hurtando un local comercial, posteriormente fueron amarrados para ser entregados a las autoridades, pero hombres armados agarraron a los jóvenes y se los llevaron a una zona enmontada del municipio, donde los asesinaron.
La Policía de igual forma, reiteró la recompensa de $100 millones por información que permita la capturar a los autores materiales, quienes serían integrantes de las disidencias de las Farc que actúan sobre la región del Catatumbo.
A la zona también se espera la llegada de un teniente coronel para que asuma la seguridad en Tibú, un municipio que, según las autoridades, tiene la mayor concentración de cultivos ilícitos del país con unas 20.000 hectáreas.
Por otra parte, la Fiscalía General de la Nación anunció la designación de un grupo especializado de fiscales, investigadores, criminalísticos y forenses que estarán al frente de la investigación.
Este doble homicidio ha causado indignación en Tibú y en el país, y fue la causa de un nuevo llamado de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU en Colombia al Gobierno para que proteja y haga respetar la vida de los niños y las niñas del país.