En el corregimiento Los Garzones de la ciudad de Montería rechazan la posibilidad de ser incluidos en el nuevo Plan de Ordenamiento Territorial (POT), y pusieron sobre la mesa sus razones de peso para negarse.
De acuerdo con voceros del sector, decidieron negarse a la iniciativa porque incrementarían los servicios públicos y prevén que sería un riesgo para su despensa agrícola que se vería amenazada con proyectos urbanísticos.
Asimismo, indicaron que para ser un barrio deberían contar con más de tres entradas y actualmente solo cuentan con una y una calle principal que es la única que fue pavimentada hace más de 30 años.
Además, en la zona hay cultivos de pancoger que salen a varias partes del país, los cuales temen que podrían ser reemplazados por urbanizaciones y construcciones.
Los líderes precisaron que, de aceptar la iniciativa, les sucederá lo mismo que Mocarí, que al convertirlo en comuna terminaron “empobreciéndolo”.
Así las cosas, no se descarta que el corregimiento apunte a volverse un municipio, pues contaría con el apoyo de Mocarí, el Retiro de los Indios y Mateo Gómez, estas dos últimas poblaciones de Cereté, para tener más de 60 mil habitantes.