Tal y como lo había advertido el veedor Albeiro Villamizar, el exdirector del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Juan Francisco Ortega Hernández, habría comprado al perito en armas para quedar en libertad y salvarse del carcelazo.
El fiscal determinó que había varias inconsistencias en el proceso de captura de polémico exdirector que fue detenido por la Infantería de Marina en el corregimiento Mateo Pérez de Sampués, donde se movilizaba en un automóvil junto a otro sujeto con un arma de fuego y una millonaria suma de dinero.
Pues dicho perito determinó que la pistola, al parecer, no servía y el funcionario nunca la había utilizado, sin embargo, Ortega Hernández que fue destituido de su cargo el día de ayer, quedó vinculado a la investigación por lavado de activos y porte ilegal de armas de fuego, pues se estima que llevaba 322 millones de pesos.
Según Villamizar, este proceso estaría amañado para favorecer al exdirector, por lo que el arma de fuego la mandaron a Bogotá donde será examinada nuevamente.
Es de recordar que, aún no para el viacrucis para Ortega, debido a que la Contraloría se tomó este miércoles la sede del ICBF para establecer la veracidad de las denuncias que pesan en su contra por presuntos malos manejos en la contratación de 52 mil millones de pesos para los programas de atención a la primera infancia vigencia 2020.
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Además, de la firma de jugosos contratos por el valor estimado de $1.074 millones de pesos, el día de la parranda en la que estuvo con representantes de fundaciones, información que se puede verificar a través del Sistema Electrónico para la Contratación Pública (Secop), donde las fechas coinciden.