Recientemente el gobernador de Córdoba, Orlando Benítez, informó que ascendieron a 6 mil las familias damnificadas por las lluvias en el departamento.
Según el mandatario, en el mes de abril le advirtió a los alcaldes sobre la ola invernal, para prevenir está situación que ahora atraviesa Córdoba y les solicitó que se alistarán en lo referente a la prevención de las inundaciones.
Sin embargo, a la fecha hay 13 municipios que se declararon en calamidad pública con el propósito de atender la emergencia, que no solo afectó las viviendas, sino que también arrasó con los cultivos de los campesinos.
Asimismo, el gobernador aprovechó para exhortar a los alcaldes a que lleguen al territorio y gestionen las ayunas necesarias para los damnificados e invitó a la ciudadanía a que no arroje residuos o basuras a los canales pluviales.
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Finalmente, Benítez sostuvo que las instituciones son responsables en algunas casos por abandono y omisión, en lo referente al taponamiento de canales y las inundaciones, no obstante, dejó claro que el pueblo será siempre responsable por las actuaciones coyunturales que se convierten en recurrentes.