En contravía de lo que piden los colombianos es considerada para muchos la marcha que promueve el exguerrillero Gustavo Petro, contra una «intervención militarista» de Estados Unidos en Venezuela.
La propuesta la hizo Petro, en un seminario de la Junta Nacional de la Federación Colombia de Educadores (Fecode), para motivar a los sindicatos y la sociedad en general y marchen en contra de la supuesta intervención militar del país estadounidense para tumbar a Nicolás Maduro como presidente venezolano.
«Las fuerzas democráticas de Colombia tienen que construir una agenda de movilización, incluido un paro nacional, que sea contra la guerra (…) un paro cívico (con suspensión) de actividades, del transporte, del trabajo (…) Los Chalecos Amarillos tienen que aparecer en Colombia», señaló el senador de la Colombia Humana.
De acuerdo con el excandidato presidencial, la guerra del gobierno de Donald Trump contra el país caribeño sería para apropiarse de su producción petrolera y según él una prueba fehaciente sería la anotación que tenía en una libreta el funcionario estadounidense en la que se leía: «5.000 tropas para Colombia».
Finalmente, Petro se fue lance en ristre contra el presidente Iván Duque y lo catalogó como «débil e irresponsable» en caso de que llegase a aceptar una injerencia militar a través de Colombia.