Tras arduas labores investigativas las autoridades lograron desarticular una red de explotación sexual de niñas indígenas que tenía injerencia en Brasil, Perú y Colombia.
Se estima que estos delincuentes cobraban alrededor de 200.000 y 300.000 pesos a los habitantes de la zona para que las menores fueran sometidas a trata de personas y prácticas de explotación sexual.
De acuerdo al coronel Jhon Sepulveda, subdirector de Protección de la Policía, estos casos no solo presentaban en Leticia, sino también en Brasil y Perú, por la cercanía de los sitios.
En total fueron capturadas 13 personas en Leticia, Amazonas, quienes tendrían siete bienes inmuebles, los cuales aparentemente utilizaban para que sus clientes cometieran los aberrantes actos contras las menores.
Cabe resaltar que, esta red criminal engañaba a las menores con falsas propuestas para después someterlas a aberrantes actividades sexuales.