Los oyentes que durante 20 largos años esperaban las noticias del reconocido periodista Jorge Corena Zapata, todas las mañanas de seis a siete, ya no podrán hacerlo más. La causa? el representante Fabio Amín ordenó cerrarle el espacio.
De acuerdo con lo señalado por el mismo director del RPC Noticias en Radio Progreso de Córdoba, Jorge Corena, la situación fue por retaliación política, en plena campaña para el Congreso.
Explicó en un comunicado que el espacio radial se había convertido en una ‘piedra en el zapato’ para las personas que malversaban fondos en el municipio o que no le cumplían las promesas a la comunidad y que dentro de ese marco había cuestionado obras como la construcción de los colectores de Lorica, la cual no reflejó la inversión y aún no ha sido culminada, la construcción de la Villa Olímpica, la construcción de la sede de la Universidad de Cartagena, cuyo lote fue donado, pero nunca se consolidó y la remodelación del estadio 3 de Mayo de la localidad.
Dijo que esos comentarios habían molestado al congresista loriquero, quien estaría detrás de esos recursos, pero que finalmente, la decisión se dio cuando este hizo un comentario en torno al abogado loriquero Carlos Gómez Espitia, quien aspira al Senado por Cambio Radical y se ha convertido en su dura competencia en la localidad.
Según Corena, el verdadero dueño de la emisora es el representante y actual candidato al Senado, Fabio Amín, pero figura a nombre de Pedro Martínez López. Esa situación se evidencia con el mensaje que le dio esta mañana la secretaria de la emisora: «Por orden del doctor, su programa no va más al aire». Ya en la emisora todos saben quién es el doctor, al igual que en el bajo Sinú.
«Por celos políticos se acabó un espacio que durante 20 años se había convertido en la única posibilidad que tenían las clases más necesitadas de reclamar sus derechos y de exigir el cumplimiento de obras que mejoraran su calidad de vida», indicó Corena en un comunicado a la opinión pública.
Finalmente, sostuvo que espera que ese tipo de situaciones no se repitan y que los políticos, en su mayoría dueños de las emisoras de Córdoba, entiendan que no puede ser requisito pagar espacios a ellos mismos, para adularlos o aplaudirlos cuando no hacen las cosas bien.