Los sollozos de la pequeña de escasas dos horas de nacidas fueron escuchados por un perro salchicha que matutinamente acompaña su dueña a dar su caminata diaria. Charmaine Keevy dijo que «cuando pasamos por el frente del desagüe, el perro empezó a ladrar insistentemente, yo había adelantado pero me devolví ante la inquietud de Georgie, pensé que estaba así porque a lo mejor había visto a un gato pero cuando me devolví escuché detenidamente y me fijé que desde la alcantarilla provenía el llanto débil de un bebé».
El hecho sucedió en Port Elizabeth, Sudáfrica, y ha sido catalogado como un verdadero milagro de vida, incluso la mujer dueña del perro considera lo mismo. «“Yo creo que fue un deseo de Dios que encontrará a la bebé. Yo nunca camino por esa ruta y por alguna razón el perro me condujo por otro camino». Señaló.
De inmediato la dueña de un restaurante pidió ayuda a lo que Cornie Viljoen, un motociclista que transitaba acudió al llamado, ambos estuvieron de acuerdo de que lo que se oía eran los sollozos de un bebé.
Cornie Viljoen, levantó la tapa y se encontraron con el cuerpo de un bebé desnudo y aún con el cordón umbilical en su cuerpo.
Sorprendido pero conciente que debía actuar rápido Viljoen bajó casi dos metros para poder rescatarlo. Una vez en el fondo de la alcantarilla se percató que el bebé estaba vivo pero muy débil. Milagrosamente el bebé se salvó de morir por las mordeduras de hormigas rojas, que a pocos centímetros del cuerpo formaban una colonia.
Teniendo el cuenta que el sitio era como la escena de un crimen y que podía servir de prueba el hombre le dio su celular a la mujer, que tomó una fotografía que se ha viralizado a través de la redes sociales en el mundo entero.
«Cuando la levanté me dí cuenta que era una niña,no sabía si la bebe estaba lastimada entonces la levante con mucho cuidado y lentamente porque era muy pequeña.» dijo el hombre.
La bebé fue tratada por hipotermia y luego fue trasladada al hospital Dora Nginza donde le dieron tratamiento de emergencia y le subieron la temperatura. la bautizaron Grace April.
La pequeña que había pesado 3,09 kilogramos ya se encuentra estable y está bajo protección de la Unidad de violencia familiar, protección a la infancia y delitos sexuales de Sudáfrica.
