Después de haber departido con unos amigos un par de cervezas, Rafael “Kiko” Rivera, padre del expreparador físico de Jaguares de Córdoba, se fue para su casa ubicada en el barrio Socorro de Sahagún, para descansar, pero cuando estaba frente a la puerta de su propia vivienda, hombres lo hicieron entrar a la fuerza y le propinaron cinco puñaladas, al parecer para robarle una gruesa suma de dinero.
Rafael Rivera, quien además es docente de la institución educativa Normal Superior Lacides Iriarte, habría recibido las heridas justamente dentro de su hogar, y pese a que actualmente estaría viviendo solo, lo encontraron malherido y amordazado en el piso de la sala la mañana de hoy 7 de enero.
Rápidamente, el educador fue trasladado a una clínica del municipio de Sahagún donde se cree que su estado de salud es delicado. Comentan algunos vecinos de Rivera, que al parecer los delincuentes le hurtaron alrededor de 5 millones de pesos.
Aún las autoridades no se han manifestado frente a este hecho lamentable, sin embargo la comunidad exige que capturen a los responsables del intento de asesinado del profesor.