En Montería el potrero de la familia Olmos en las inmediaciones de la Urbanización Santa Elena II se convirtió en el patio de juegos de los niños de las urbanizaciones Santa Teresa, Santa Elena etapas 1, 2, 3 y 4, lo cual se volvió una problemática porque los menores invaden un terreno privado.
Según algunas personas de la comunidad la urbanización Santa Elena 3 tenía tres manzanas destinadas a la construcción de un parque infantil y zonas verdes como obras de compensación, pero la constructora encargada no ha cumplido.
El administrador del potrero de la familia Olmos rompió 4 botellas de vidrio en la parcela donde se meten los niños, con esta acción se pretende desestimular el juego de los niños en estos terrenos privados.