La presidencia de la Asamblea de Córdoba para el próximo periodo se está convirtiendo en una guerra de poderes entre dos diputados oficialistas del gobierno departamental, ambos afines a la casa Besaile, serían ellos Luis Gabriel Degiovanni y Toño Ortega Otero
Lo que denota que a pesar de la crisis política que afronta el departamento de Córdoba, tras la captura de los «Ñoños», Musa Besaile, hermano del actual Gobernador y Bernardo el Ñoño Elias, aún los hilos del poder se siguen manejando, esta vez desde la Gobernación de Córdoba, tanto así que los aspirantes sacan lo mejor de sus cartas y hacen lobby entre sus colegas y jefes políticos.
Las barajas se mueven al interior de la Duma con las siguientes fichas: Bernardo el Ñoño Elias, quien se encuentra preso en la cárcel La Picota, por el escándalo de Odebrecht cuenta con cuatro diputados son ellos: Jaime Bello, el «Mono» Isidro, José Hugo Restan y Carlos Burgos. De ellos solo uno no apoyaría la aspiración del contador público y empresario Toño Ortega Otero.
Por el lado del también senador preso en la Picota Musa Besaile Fayad, sus fichas en la duma son los diputados Toño Ortega y el abogado Luis Gabriel Degiovanni, así las cosas la presidencia de la asamblea quedaría en manos de la coalición del gobernador Edwim Besaile Fayad.
Y aunque parezca prematuro pues la nueva mesa directiva se elegiría la última semana del mes de noviembre La lengua caribe conoció de una intensa campaña por parte de Toño Ortega para convencer a sus homólogos de votar por él a la presidencia, tanto así que Ortega Otero dice contar desde ya con el voto del loriquero Juan Camilo Corrales Saleme, y a punto de convencer a la actual presidenta Ludys Rodriguez Angulo y Orlando Benítez Mora. Sin embargo aquí no hay nada escrito ya que la última palabra la tendría en este caso el exsenador de la casa roja Juan Manuel López Cabrales, jefe político de estos tres diputados.
Mientras que por el lado del abogado Luis Gabriel Degiovanni Behaine manifiesta que en estos momentos hablar de una campaña a la presidencia de la asamblea es muy prematuro.
No obstante es bien conocido sus lazos de amistad con el secretario general de la gobernación Roberto Tirado Hernández de quien se dice le habla al oído al gobernador Besaile Fayad.
Pero en esta puja a pesar de los respaldos de la «casa oficialista», «de la casa roja» y del secretario Tirado, los conservadores tendrían la sartén por el mango porque no han definido a cual de los aspirantes respaldarían. Como quien dice a Luis Gabriel Degiovanni y Toño Ortega Otero les tocaría hacerle buen lobby a sus colegas Remberto Tapias y el también loriquero Jairo López Saleme.
Pero como en todo triunfo hay que sufrir un poco la situación no sería fácil para ninguno de los aspirantes teniendo en cuenta que al inicio de la actual gobernación se hizo un pacto para respetar a presidencia de la asamblea durante los cuatro años de gobierno, así: durante el primer año el presidente sería del partido de la U, pero de la línea del Ñoño Elias, y así fue con Carlos Burgos. Durante el segundo el pacto se cumplió para el Partido Liberal con la exconcejal de Montería Ludys Rodríguez Ángulo. Pero en este tercer año a pesar de «respetar» el pacto no hubo acuerdo entre los dos diputados de la U, que quieren quedarse con la presidencia, ambos de la línea de Musa Besaile.
Es de aclarar que durante las elecciones anteriores al Congreso de la república Antonio «Toño» Ortega respaldó la aspiración de Musa Besaile al senado y de Sara Piedrahita a la Cámara, mientras que Luis Gabriel acompañó a Musa Besaile y Raymundo Méndez Bechara.
Está tan difícil la puja para alcanzar la presidencia de la Asamblea para el periodo 2018, que no solo se tendrá en cuenta el componente político de los aspirantes sino que suma puntos en ellos el componente administrativo. A esta situación se sumaría la «influencia» del «secretario» Tirado de quien se habla inclinaría la balanza a favor de la aspiración de su gran amigo Luis Gabriel Degiovanni. Finalmente en toda esta historia amanecerá y veremos que pasa con la codiciada presidencia.