En el corregimiento de Palo de Agua en Lorica, Córdoba, existen cerca de mil personas que por primera vez no están viviendo con la zozobra de perderlo todo por el fuerte invierno. ¿Milagro? No señores, todo se debió a un proceso de inversión social que duró cerca de tres años.
600 estudiantes del colegio La Unión, en el corregimiento de Palo de Agua y de 400 habitantes que viven en 100 casas del barrio Cotocá Abajo no se inundaron este año. Hoy las casas y el colegio flotan, las construcciones están apoyadas en pilares a 1,50 metros del suelo adaptarlas al cambio climático.
Por eso, en la región, esto se ve como una hazaña. Así lo calificó el rector Julio Rafael Calao Díaz, quien indicó que desde que llegó al colegio, en 2006, este ha sido el único año que han podido seguir dictando clases mientras llueve.
“Hace 11 años teníamos unas aulas deterioradas por las afectaciones que dejan las lluvias año tras año. A raíz de esas situaciones, las administraciones locales empezamos a sugerir que el Fondo Adaptación nos ayudara. Así empezaron a hacerse realidad los proyectos. Se inició con un primer bloque, de seis aulas y dos pisos, en donde se construyó también una sala de informática”, contó el rector.
Con el apoyo de la Unicef desde 2013 se inició la construcción de una edificación que no se inundara. “Hoy lo logramos. Estamos en excelentes condiciones. Mientras que todos los barrios vecinos están sufriendo por el invierno, nosotros dictamos clase normal. Ahora de lo que estamos pendientes es de la entrega del colegio porque el proyecto era a 10 meses y ya han pasado tres años y no nos lo han entregado por completo”, reveló el rector y sostuvo que, de acuerdo con los ingenieros, la estructura tiene un avance superior al 90 % y aunque están funcionando las aulas y parte de la cocina, “aún está pendiente el sistema eléctrico”.
Iván Mustafá, gerente del Fondo Adaptación, explicó que los líderes comunitarios le reportaron que 26 aulas, la biblioteca y la sala de cómputo están en buen estado y prestan sus servicios a la comunidad.
“Invertimos aproximadamente $7.600 millones en la construcción de la nueva sede del colegio La Unión que tiene un área superior a los 7.000 metros cuadrados y está adaptada al cambio climático, lo que permite tener continuidad en las clases”, dijo.
La alcaldía de Lorica informó que las 100 casas construidas hacen parte de un proyecto de reconstrucción de 253 viviendas, cuya inversión es cercana a los $12.000 millones y beneficiarán a más de 1.100 personas.
La institución que tiene un avance del 98 % y dada la necesidad de los estudiantes y los requerimientos constantes de la comunidad, se decidió entregar provisionalmente la obra que, ante las inundaciones recientes, “demuestran que fue acertada la opción”.
Para la entrega definitiva hace falta el Reglamento Técnico de Instalaciones Eléctricas, que debe presentar el constructor ante el operador de energía. En este caso es Electricaribe. “Ante los atrasos por parte del constructor Inversiones y Construcciones Beta, el Fondo inició proceso de incumplimiento que está en marcha”.