El docente jubilado desaparecido en las últimas horas de su finca Paimaná, en el corregimiento de Berástegui, Walter Emiro Vergara, habría sido asesinado por su propio trabajador y luego lo habría enterrado en el mismo predio.
Esa es una de las hipótesis que manejan algunos allegados al profesor que dictó clases durante largos años en el colegio Marceliano Polo de Cereté y en la Universidad de Córdoba.
Aunque el hecho se ha mantenido bajo absoluta reserva por parte de las autoridades, se conoció que están investigando una versión entregada por personas cercanas en el sentido que habrían visto que algo ardía en el predio, la noche anterior al supuesto plagio de Vergara. Con base en esos datos se ha iniciado una búsqueda intensa en el área y se hicieron varias excavaciones.
De manera extraoficial se indicó que habrían encontrado el cuerpo quemado y sepultado del pensionado de 75 años de edad y que el autor del crimen podría ser el mismo trabajador, cuya versión entregada a las autoridades hizo despertar sospechas.
El empleado de la finca, que llevaba pocos meses laborando con Vergara, dijo primero que él se había ido voluntariamente con unos hombres que habían llegado a buscarlo en un carro de color gris, que se había cambiado de ropa y que le había pedido que siguiera con las labores de la finca y que luego vendiera la leche. Luego dijo que el carro era de color blanco.
El hijo de la víctima, Walter Vergara Padilla, dijo en su momento que esa versión no era creíble toda vez que su padre es un hombre metódico y que jamás se iría con desconocidos, sin avisar a la familia, y mucho menos dejaría la cartera con sus documentos en la finca, como ocurrió en esta oportunidad.
Hay que indicar que en los actuales hay un operativo especial en la finca, ubicada en la zona rural de Ciénaga de Oro, pero la versión del hallazgo de un cuerpo quemado en el predio, aún no ha sido oficialmente confirmada por las autoridades.
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