El ‘remezón’ de funcionarios en la Fiscalía General de la Nación no incluyó a dos fiscales que enfrentan procesos judiciales en esta sección del país: Mario Alberto Lora Correa, sindicado de asesinar a dos jóvenes en la calle 41, y Orlando Márquez, investigado por la desaparición de 179 kilos de cocaína.
Con el grave escándalo en el que se ha visto envuelta la entidad, se empezó a especular sobre la salida de ambos funcionarios, pero estos permanecerán en sus cargos porque, según el mismo organismo, no se ha dictado una condena en su contra y es necesario respetar la presunción de inocencia.
Por lo pronto, Márquez tras la investigación fue cobijado con detención domiciliaria y Lora está de fiscal delegado ante jueces del circuito especializado de la Dirección contra Organizaciones Criminales de Atlántico.
Caso Lora
El fiscal Mario Lora, pese a que disparó, presuntamente en estado de embriaguez, contra Camilo Andrés Rodríguez y Harold Suárez Rivas, el pasado 18 de junio de 2016, está en libertad.
Pese a que el mismo fiscal general de la Nación, Néstor Humberto Martínez, pidió que se hiciera rápidamente una audiencia de imputación de cargos para el fiscal Lora y se pidiera la medida de aseguramiento intramural, eso ha sido imposible.
En ese caso se han presentado todo tipo de dilaciones, las cuales fueron duramente criticadas por el mismo Fiscal, quien reiteró, durante su visita a Montería en el mes de enero, que causa cierta desazón que frente a hechos donde las imputaciones comprobadas por ciertos delitos, la ley no esté conduciendo a medidas de aseguramiento de las personas imputadas.
Caso Márquez
El fiscal Orlando Márquez está en líos luego que se decretara una orden de captura en su contra por la pérdida de un alijo de drogas ilícitas incautadas tiene en líos a un fiscal de Lorica.
En ese mismo proceso está vinculado el fiscal de Cereté, Andrés Almanza Guzmán, quien fungía como funcionario del Cuerpo Técnico de Investigaciones, CTI, cuando se perdió la coca incautada.
Orlando Márquez, fue designado como director seccional de Fiscalías de Córdoba por el fiscal Néstor Humberto Martínez, pero no logró posesionarse a raíz de denuncias en su contra.
Trascendió que la droga incautada cerca de Coveñas (Sucre), que iba a ser destruida no llegó hasta esa instancia y misteriosamente se esfumó.
Ambos funcionarios siguen incursos en las investigaciones.