Jaguares de Córdoba volvió a sumar de local, esta vez por la mínima diferencia ante el disminuido Once Caldas de Manizales, juego que se desarrolló este sábado en Montería. Felicidad en la tribuna y celebración de los jugadores ‘felinos’ por los tres puntos añadidos a la lucha por el descenso.
Todo era positivo: el aliento de la gente, la emoción en la tribuna, la asistencia, el excelente planteamiento de los cordobeses en el terreno de juego, las opciones de anotación y el golazo de Steer, sin embargo, un lunar hizo que la tarde no fuera perfecta en el Jaraguay.
Tras el pitazo final los ánimos se caldearon entre los jugadores, el guardameta visitante José Cuadrado, visiblemente enojado no recibió bien el saludo de su colega, el también cuida palos Sebastián López, quienes discutieron pero sin ir a mayores.
Ya en la zona mixta, el alegato de varios jugadores fue captado por las cámaras del canal Cabletelco, imágenes en las que se ve al entrenador Francisco Maturana reclamándole a López y exigiéndole respeto, mientras tanto se sumaban el estratega local Hubert Bodhert en defensa de su jugador y de nuevo Cuadrado, quien visiblemente se veía molesto, por lo que otros deportistas e integrantes de ambos cuerpos técnicos tuvieron que mediar para evitar que se fueran a los golpes.
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https://youtu.be/5VwXTJ-NLkM
Video cortesía Cabletelco.
A ciencia cierta, aún no se sabe que sucedió que causó el desagrado del onceno manizalita y tampoco la reacción de sus jugadores, pero ya en rueda de prensa el internacional Francisco Maturana fue cuestionado sobre el altercado a lo que respondió con bastante diplomacia:
“Tengo respeto y aprecio por el profesor Bodhert, es alguien con una condición humana maravillosa y una condición técnica de valorar. Hoy su equipo jugó bien y más allá en su parte extra futbolística, andamos buscando para la vida el competidor integral. A mí un jugador no me puede decir que en el fútbol vale todo, en el fútbol no vale todo, en el fútbol si vos irrespetas cuando estas arriba, después cuando estés abajo todo mundo te irrespeta”, sentenció el entrenador.
Al final solo fue cuestión de calentura del momento, un hecho que no pasó a mayores y que como los mismos futbolistas lo dicen, son cosas del partido y se quedan en el terreno de juego.
Cuando finalizó la rueda de prensa, ambos entrenadores se abrazaron, se ofrecieron disculpas y se despidieron con una sonrisa.