La revocatoria de la licencia ambiental a la firma Graneles del Golfo, para la construcción de un puerto de cargue de carbón en la Bahía de Cispatá, por parte de la Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú y San Jorge, CVS, le traería investigaciones a la Corporación por parte de la Procuraduría, y una posible demanda de reparación por parte de la firma portuaria, que precisamente está a cargo del cuñado del actual director de la CVS José Fernando Tirado Hernández.
En términos económicos la reparación estaría por encima de los 24 millones de dólares, que es el monto inicial de la primera fase del proyecto. Así las cosas Graneles del Golfo S.A podría cobrar un lucro cesante, es decir las pérdidas por la no operación del puerto, lo que indica que este daño patrimonial, partiría de los 69 mil 984 millones de pesos colombianos.
Respecto al tema La Lengua Caribe consultó la opinión del abogado especialista en Derecho Ambiental y Urbano Territorial, José Javier De la Hoz Rivero, quien además defendía la posición de las comunidades étnicas y pesqueras afectadas por la posible construcción del puerto.
«La empresa portuaria podría interponer unos recursos de reposición en contra de esta resolución que revocó la licencia ambiental, pero también eventualmente podría alegar unos derechos adquiridos que se le generaron con la expedición de la licencia en el año 2014, lo que ocasionaría a su vez una acción de reparación directa ante el Tribunal Contencioso Administrativo en contra de la CVS para que se le reparen los perjuicios que podrían alegar tener con la revocatoria de esta licencia» Señaló el abogado De la Hoz.
José Javier De la Hoz Rivero.
El Jurista agregó que. «Esto se asemeja mucho a las demandas internacionales que afronta la Nación en estos momentos por las revocatorias de otras licencias, la más reciente es la de Caño Cristales, que son sumas muy grandes y que se debe a la irresponsabilidad de otorgar licencias ambientales en suelos de protección, en zonas protegidas que luego tienen que ser revocadas»
En cuanto al posible conflicto de intereses e irregularidades en que habría incurrido el director de la CVS, José Tirado, al otorgale la licencia a Graneles del Golfo, cuyo representante es su cuñado; el togado opinó. «En ese caso tendría que entrar a operar el poder disciplinario de la Procuraduría y revisar el asunto , de hecho es una clara incompatibilidad, hay una clara inhabilidad, no obstante es la Procuraduría quien tiene que entrar a calificar la conducta de los servidores públicos que intervinieron en el proceso de licenciamiento».
Mientras que la CVS se vería involucrada en este tipo de situaciones, la noticia de la revocatoria fue aplaudida por centenares de ciudadanos que venían solicitando dicha medida.
Es de anotar que La CVS informó hoy a través de un comunicado de prensa, que «luego de hacer una revisión minuciosa al proceso de otorgamiento de licencia ambiental a la Sociedad Portuaria Graneles del Golfo S.A, con ocasión de la solicitud de revocatoria presentada por un ciudadano, se ha expedido en el día de hoy la Resolución No. 2-2246, a través de la cual se procedió a revocar la misma».
La decisión según la entidad, se fundamenta en argumentos técnicos, jurídicos y sociales, así como en la constatación de la presencia real de comunidades étnicas y afro en la zona de influencia del proyecto, a las cuales se les debió garantizar la realización de la consulta previa, como derecho fundamental.