Montería parece hacerle honor a la frase que la reconoce como la Perla del Sinú, pero no por ser precisamente una brillante joya, sino porque como la perla queda sumergida entre las aguas, en este caso cada vez que llueve. Y es que hasta la más débil llovizna hace colapsar el sistema de alcantarillado, convirtiendo muchas de sus calles en verdaderas piscinas de aguas residuales.
Esta es la calle 27 con carrera 4ta una de las muchas en Montería que se vuelve intransitable cada vez que llueve.
Los malos olores en muchos sectores de la ciudad son insoportables, sobre todo en la zona del centro, donde las viejas tuberías del alcantarillado parecen carecer de la capacidad suficiente para transportar toda el agua lluvia que cae sobre el casco urbano de la ciudad, haciendo imposible el paso para los peatones.
Así luce la calle 27 entre carreras 4ta y 5ta, a pocos metros de las sedes de la Alcaldía y la Gobernación del departamento de Córdoba.
Así se encuentran la mayoría de los canales de aguas pluviales de la ciudad. Muchos parecen basureros flotantes.
El sistema de alcantarillado de muchos sectores de la ciudad, da muestras de no estar funcionando de la manera adecuada, como se puede ver en esta fotografía tomada en la calle 26 con carrera 9.
Esta fotografía corresponde al estado actual de uno de los canales principal de aguas residuales de la ciudad que cruza por varios barrios del centro.
Esta alcantarilla desbordante fue captada por nuestro lente, en la calle 27 con 10.