Cuando el Ideam marcaba una sensación térmica de 44 grados y una temperatura de 35 grados, varios desplazados de Córdoba, hoy beneficiarios de un subsidio cobraban el mismo bajo el inclemente sol.
Las críticas apuntan al riesgo que corren algunos de los beneficiarios debido a su avanzada edad, lo que no se tuvo en cuenta por los responsables del programa ni mucho menos por los operadores del mismo.
«Aquí nos toca aguantar aguantar de todo para cobrar esta ayuda que no llega a los 300 mil pesos, lo malo es que en las filas muchos viejitos les da lo que uno llama beriberi,y es peligroso porque imagínese una persona mayor de 70 o 80 años de pie y bajo este sol, es un peligro» dijo Edilberto uno de los desplazados que cobraba el subsidio.
Señalan que entre las calle 41 y 42 con carrera 7, en el punto de pago asignado por lo menos deben disponer de polisombras los días de pagos.
