De las 981 llamadas que hizo la comunidad a la línea de emergencia 123, un total de 355 resultaron ser llamadas ociosas.
La denuncia fue hecha por el comandante de la Policía Metropolitana de Montería, coronel Carlos Rojas, quien indicó que 277 adultos y 78 niños llamaron a la línea de emergencia, sin que realmente hubiera mérito para ello.
Explicó que esa situación pone en riesgo la seguridad de la misma comunidad porque engañan a los hombres de la institución quienes salen a atender el llamado y no encuentran nada y pueden estar perdiendo tiempo valioso para atender casos reales.
Hay que indicar que hubo una leve disminución de ese tipo de llamadas, pues en 2015 se reportaron 329 llamadas de adultos molestando y 107 de niños.
Los directivos de la institución hicieron un llamado a la comunidad para que se abstengan de hacer ese tipo de bromas, pues no se puede utilizar un mecanismo tan serio para molestar.
También conminaron a los padres de familia para que estén atentos ante ese tipo de situaciones que están haciendo sus hijos porque ello afecta el uso esencial de la línea.
Se estableció además que la Policía no tiene las herramientas suficientes para hacer un control porque el volumen de llamadas es muy alto y porque en Montería aún no tienen los identificadores de llamadas y los equipos de georreferenciación para establecer el sitio de donde se origina.
Ese tipo de llamadas puede originar sanciones pues la Comisión Reguladora de Comunicaciones establece que las empresas de telefonía celular y fija pueden suspender el servicio de los usuarios que hagan mal uso de las líneas de emergencia.