Desde el 2017 la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana sufrirán grandes cambios como parte de una estrategia integral que busca promover el desempeño deportivo y potencial la calidad del fútbol del continente sudamericano.
La iniciativa anunciada por la Conmebol mediante un comunicado, armonizará los calendarios de las competencias continentales con los torneos o ligas locales de cada país, de esta manera se incentiva a los equipos a dar lo mejor de sí y no tener que escoger entre el campeonato internacional y el torneo de su país.
El boletín resalta lo siguiente: “Los cambios son el resultado de un estudio técnico que la Conmebol viene adelantando desde hace varios meses con la asesoría de consultores especializados con el objetivo estratégico de potenciar la calidad del fútbol suramericano e impulsar su desempeño deportivo, esto por medio de una estrategia integral que permita generar y reinvertir más valor en su desarrollo y promueva la sustentabilidad de los clubes y las asociaciones”.
Estas reformas que comenzarán a partir del 2017, cambiarán de 27 a 42 semanas la duración total del calendario de la Copa Libertadores, jugándose de febrero a noviembre, a su vez la Copa Sudamericana se jugará a partir de fines de junio y finalizará en diciembre.
Además, tal y como se hace en Europa, 10 clubes que jueguen en la Copa Libertadores y no avancen a octavos de final podrán seguir compitiendo en la Copa Sudamericana del mismo año, y los campeones de ambas ediciones tendrán cupo directo a la fase de grupos de Libertadores del año siguiente.