El año pasado una influencer y modelo de 36 años, identificada como Carey, tomó una decisión que dejó sin palabras a más de una persona alrededor del mundo.
La mujer decidió casarse consigo misma en una ceremonia en Londres, sin embargo, a pesar de mostrarse muy convencida con su decisión, tan solo un año después presentó la solicitud de divorcio.
En un principio Carey buscaba desafiar los estándares y las normas de las relaciones sentimentales, pero al poco tiempo confesó que la experiencia no salió como pensaba, pues terminó sintiéndose más sola de lo que imaginaba.
¿Usted lo haría?