Este pasado domingo de ramos empezó a circular una fotografía por redes sociales en la que se logra observar a miembros del Ejército de Liberación Nacional (ELN), realizando lo que sería un patrullaje, en zona rural de Tibú, Norte de Santander.
Sin embargo, la polémica inició tras viralizarse una fotografía en la que no solo posan los guerrilleros, sino que además están acompañados por niños que simulaban, con palos, tener un fusil en sus pequeñas manos.
Al parecer este hecho que ha sido despreciado por todos los colombianos, ocurrió específicamente en el corregimieno Versalles de Tibú.
Trascendió que este grupo de personas del ELN, pertenece al frente Juan Fernando Porras Martínez, estructura con presencia en Cúcuta, la frontera con Venezuela, Tumaco y en límites con el departamento de Arauca.
Por esta razón, la Defensoría del Pueblo no dudó en pronunciarse y rechazó de manera rotunda este tipo de prácticas que vulnera los derechos de la niñez para utilizarlos con un propósito delictivo.
“Esta es una situación muy preocupante pues no solo evidencia la facilidad y el control social y territorial que ejerce el grupo armado en la zona, sino que normaliza su presencia e invita tácitamente a los niños, niñas y adolescentes a pertenecer a estos grupos”.
La entidad de derechos humanos reitera al Gobierno Nacional, departamental y territorial la necesidad de seguir fortaleciendo entornos protectores de niños, niñas y adolescentes, para evitar que sean víctimas de reclutamiento, uso y utilización por parte de grupos armados ilegales, así como insta para que se despliegue oferta institucional en el territorio que permita disminuir este tipo de situaciones.
Finalmente, la Defensoría del Pueblo advierte que el ELN debe mostrar verdaderos gestos de paz en el marco de la mesa de diálogo que mantiene con el Gobierno Nacional, de manera particular cesar todas las acciones armadas.