La Policía de Kenia halló 39 cuerpos enterrados en fosas comunes dentro de unos terrenos propiedad del líder cultista keniano Paul Mackenzie Nthenge, quien se autoproclama líder de una secta del condado de Kilifi, en la costa de ese país.
El hombre fue enviado a la cárcel pues fue acusado de influir a sus seguidores para que ayunaran hasta la muerte.
Las personas habrían muerto de hambre después de ayunar con el objetivo de encontrarse con Jesucristo, así lo indicó el Directorio de Investigaciones Criminales (DCI) de Kenia indicó.
Cerca de 32 fosas comunes fueron halladas por parte de los investigadores en la finca de Mackenzie en la vecina localidad de Malindi, de las cuales todavía quedan al menos una decena por desenterrar.
Es de recordar que, Mackenzie, líder de la llamada Iglesia Internacional de las Buenas Noticias, por vez primera se entregó a la Policía el mes pasado, después de que dos niños murieran por inanición delante de sus padres, miembros de la secta.
Por su parte, el diario keniano The Nation, tras ser liberado bajo fianza, volvió a ser arrestado el 15 de abril y ahora mismo ha iniciado una huelga de hambre para protestar contra el trato recibido.