Los ojos del mundo están puestos en el conflicto entre Palestina e Israel, pues millones de personas a través de las redes sociales están viendo las atrocidades que está dejando esta guerra, en la que principalmente se han visto afectados los bebés y los niños.
En el hospital de Al Shifa, el más grande de Gaza, los bebés prematuros están siendo envueltos en papel aluminio y colocados junto a agua caliente en un intento desesperado y quizás la última opción para mantenerlos vivos. Muchos de ellos ya han muerto a falta de las condiciones necesarias para su supervivencia.
Se dio a conocer que desde el 12 de noviembre se había acabado el suministro de oxígeno en la unidad neonatal, las reservas de combustible se agotan y no hay electricidad, las instalaciones han quedado inutilizables para salvar vidas.
Con respecto a lo anterior, la Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó que «ya no funciona como hospital… se está convirtiendo en un cementerio» para bebés.