El paso del huracán Julia obligó a que se decretara emergencia en varias regiones de Colombia el pasado fin de semana y el Urabá antioqueño no fue ajeno a esta situación, pues allí se vieron obligados a suspender la navegación de embarcaciones.
Según un reporte de las autoridades de esa zona del país, uno de los efectos que dejó los coletazos del huracán en el municipio de Necoclí fue que se agudizó la crisis migratoria por la llegada de más de 2.500 personas diarias en busca de viajar a la frontera con Panamá y seguir su camino hacia Estados Unidos.
Asimismo, revelaron que tal y como ocurrió meses atrás, en la localidad hay represamiento en hoteles y playas con más de 10 mil extranjeros, entre los que se encuentran venezolanos, ecuatorianos, cubanos y africanos, quienes esperan un tiquete de lancha para ir hasta el Tapón del Darién.
No obstante, ante el paso del huracán Julia el pasado fin de semana los pasajes se redujeron debido a la suspensión de la navegación de las embarcaciones y esto ha generado el represamiento de inmigrantes.