Luego que entrara en vigor la cadena perpetua para violadores y asesinos de niños en Colombia, la directora del ICBF, Lina Arbeláez, se pronunció al respecto.
Arbeláez celebró la noticia y aseguró que la ley debe ser “complementaria con políticas públicas, programas y proyectos que giren entorno al cambio de normas y valores para que entendamos que la niñez es sagrada”.
De igual forma, expresó que la norma representa un mensaje claro contra los «depredadores violentos que asechan la integridad de la niñez en nuestro país, pues tendrán la pena más alta de todo el ordenamiento jurídico colombiano».
Por otro lado, se refirió a las preocupantes estadísticas de la violencia contra los menores, pues en 2020 se registraron más de 14 mil procesos relacionados con niños que fueron violentados, física o sexualmente.
“No podemos seguir hiriendo a los niños, niñas y adolescentes de Colombia, quienes son el futuro y el presente de nuestro país (…) Lo que tenemos hacer es deconstruir como sociedad las normas que han naturalizado la violencia contra la niñez”, puntualizó.