Gran preocupación hay entre los comerciantes y areneros aledaños a la ribera del río Sinú, donde la Alcaldía adelanta obras, toda vez que desconocen que será de su suerte.
De acuerdo con uno de los voceros, la construcción del nuevo tramo de la ronda del Sinú traerá su desalojo, lo cual les estaría violando su derecho al trabajo, pese a que les aseguraron que serán compensados.
Asimismo, los residentes del sector lamentan que sus viviendas sean demolidas, al igual que, sus negocios, los cuales han sido su sustento por décadas.
“Nos dijeron que nos iban a dar un local en el Mercado del Oriente, pero todos sabemos que los negocios allá no son prósperos”, advirtió uno de los comerciantes.
Se estima que serían alrededor de 180 los areneros que resultarán afectados con la construcción de la obra y 12 los propietarios de locales que tendrán que ser reubicados.
Es de resaltar que, hasta el momento no se ha logrado un ningún tipo de acuerdo en el que los afectados estén conformes.