La Selección Colombia volvió a ser armónica, en el debut oficial de Reinaldo Rueda como entrenador, se impuso categóricamente 3-0 en su visita a Perú, juego correspondiente a la séptima fecha de las Eliminatorias Sudamericanas a Catar 2022.
Más allá de lo deportivo, que tuvo muchos puntos altos que se resaltan a nivel continental: como la recuperación de la identidad futbolística (ofensiva y sólida en defensa), el triunfo de la tricolor llegó en medio del difícil momento social que atraviesa el país.
Lo anterior teniendo en cuenta que en suelo colombiano hace más de un mes se vienen registrando multitudinarias manifestaciones en contra del gobierno de Iván Duque, jornadas en las que han denunciado abusos excesivos por parte de la Fuerza Pública, asesinatos a civiles y uniformados, desmanes, daños a la propiedad pública y privada, entre otros delitos.
Dicha situación, incluso, hizo que la Conmebol tomara la determinación de desistir en que Colombia fuera sede de la Copa América 2021, que inicialmente organizaría de manera conjunta con Argentina, que también se cayó debido a la emergencia sanitaria generada por el Covid-19, y finalmente se desarrollará en Brasil.
Este panorama evidentemente afectó los ánimos de los colombianos y así se sintió durante la previa del partido en suelo peruano, pues no había el júbilo que, en otrora, transmitían los aficionados cuando jugaba la tricolor, de hecho, algunos en redes sociales aseguraron que le harían fuerza al rival.
Sin embargo, lo anterior cambió una vez rodó la pelota en el estadio Nacional de Perú, el equipo de Reinaldo Rueda dio catedra de fútbol, superó ampliamente a su rival y así lo demostró el 3-0 final, donde Yerry Mina, Matheus Uribe y Luis Díaz, marcaron para el combinado patrio.
La victoria de Colombia, más allá de la necesidad de recomponer el camino en las Eliminatorias, fue un bálsamo para el país en medio del difícil momento social que atraviesa y dejó en evidencia que la Selección nos une.