Unisinú le da bienvenida a su rectora general, María Fátima Bechara Castilla

Unisinú le da bienvenida a su rectora general, María Fátima Bechara Castilla

La Universidad del Sinú – Elías Bechara Zainúm da la bienvenida a la doctora María Fátima Bechara Castilla, quien regresa a su cargo como Rectora General de nuestra Institución.

La Rectora General lleva 35 años de su vida dedicados al servicio de la Institución y ha sido promotora permanente en la construcción de los procesos académicos y administrativos de nuestra Alma Máter.

Estás fueron las palabras de la doctora María Fátima Bechara Castilla.

Apreciados miembros de nuestra comunidad universitaria,

Hoy, con gran entusiasmo y complacencia, regreso a la institución a la que he dedicado mi vida durante más de treinta y cinco años. Retomo de nuevo mi cargo como Rectora General, aspirando, como siempre, contar con su inestimable concurso de toda la comunidad universitaria, desde el más alto nivel directivo y académico hasta los insustituibles servicios generales.

Al fin y al cabo, todos somos un equipo articulado, en cuyo caso nos anima el interés que laboremos con espíritu de cuerpo y unidad, puesto que así, por lo demás, lo exigen los retos que la ‘nueva normalidad’ nos ha impuesto. Confieso que hoy encuentro un mundo diferente, una sociedad golpeada por el mortal Covid 19, que ha enlutado a millones de familias y ha afectado con intensidad a nuestro país, el que estuvo semiparalizado en sus actividades económicas y sociales por más de un año.

Aún así, registro con beneplácito que, a pesar de la gravedad de la situación mundial y nacional, la marcha de la Universidad no se detuvo, puesto que logró superar y conjurar las circunstancias adversas y alcanzó las metas propuestas en el plan de desarrollo, adaptando y transformando su quehacer a través de la virtualidad, permitiéndole seguir cumpliendo su compromiso misional con la sociedad, y de modo especial con todos los estudiantes, nuestra genuina razón de ser.

Encuentro una academia consolidada y fortalecida, que ha hecho posible logros de tanta trascendencia como el reconocimiento de la Acreditación en Alta Calidad otorgada por el Gobierno Nacional a nuestra Institución, que se debe igualmente a ustedes, a su esfuerzo, a su mística y comprobado compromiso. Reciban pues todo mi reconocimiento, a la vez que mis más sinceras felicitaciones.

Mi renovada invitación, es a continuar sirviendo a la sociedad, a la comunidad profesoral y estudiantil, al mismo tiempo que a generar confianza y a trabajar mancomunadamente, por el bienestar y por la calidad de vida de nuestra comunidad, la que soñamos cada vez más fraterna y solidaria, posicionando a nuestra Universidad como una de las más encumbradas en el concierto nacional, reafirmando su visibilidad y vocación internacional.

La Rectoría General será de puertas abiertas, receptiva a todas las iniciativas y desafíos de sus estamentos, orientada a lograr los mejores resultados en el quehacer universitario.

Por todo ello, es justo hacer un explícito reconocimiento a las directivas de la Institución y a sus funcionarios por el deber cumplido, quienes son dignos del mayor respeto y consideración de mi parte, lo que será una constante en el trabajo de la Rectoría General, pues valoro en alto grado el aporte permanente de académicos y administrativos a esta gran Universidad para el logro de su loable propósito, encaminado a encontrar en nuestra casa de estudios una auténtica y legítima opción de desarrollo respecto de sus proyectos de vida y de crecimiento personal, profesional y académico.

 Los convoco entonces a unirnos y pedirle a Dios, nuestro Padre, que nos guíe, e ilumine el camino que nos conduzca, en estos momentos difíciles, a transitar con fe, templanza, determinación y esperanza por un promisorio mañana, lleno de satisfacciones y logros para nuestra comunidad universitaria y para la sociedad, en general, urgida de nuevas oportunidades y de aportes útiles, como invariablemente lo soñaron nuestros padres fundadores, a quienes hoy con fervor evocamos, esos mismos que, con plena convicción, nos inculcaron mantener unidos la llama encendida, la que ruego que todos preservemos, para que no se extinga o se debilite. Ese es nuestro gran compromiso, y también el de las generaciones venideras.

Con respeto y afecto,


MARÍA FÁTIMA BECHARA CASTILLA
Rectora General
UNIVERSIDAD DEL SINÚ- ELÍAS BECHARA ZAINÚM