Cuando se realizaba la audiencia de imputación de cargos y medida de aseguramiento contra Medardo Romero, por el caso de irregularidades en la reventa de boletas en partidos de la Selección Colombia, el fiscal del caso acusó a tres directivos de la Federación Colombiana de Fútbol de recibir millonarios sobornos.
Como se recordará, Romero era el exrepresentante legal de TicketYa y es sindicado de la reventa de boletas por más de 40 mil millones de los duelos futbolísticos que se dieron antes del Mundial de Rusia, por estos hechos el ente acusador le imputó los cargos de agiotaje (especulación para modificar los precios de los productos), concierto para delinquir y corrupción, sin embargo, este no aceptó los cargos.
De acuerdo con la Fiscalía, a Los directivos Luis Bedoya, expresidente de la Federación Colombiana de Fútbol; Ramón Jesurún, actual presidente de la FCF; y Álvaro González, presidente de la Difutbol y vicepresidente de la FCF, les habrían pagado coimas por más de 1.000 millones cada uno, por la entrega del contrato para la venta de boletería en los partidos de local de la Tricolor, disputados en el estadio Metropolitano de Barranquilla.
Ante estas acusaciones, la FCF señaló que estos testimonios del exmiembro del comité ejecutivo Jorge Perdomo, serían falsos y que Bedoya, Jesurún y González, no habría recibido estos sobornos para adjudicar el contrato de boletería.
Cabe resaltar que, Perdomo relató ante la Fiscalía en el 2018 que a varios altos directivos de la FCF les realizaron pagos por estos contratos.
Así las cosas, si presentan cargos contra estos funcionarios, tendrían que renunciar a sus cargos, ya que la investigación les impide ser parte de las directivas de la FCF.