La víctima fue identificada como Jairo Ortiz, un cuidandero indígena, perteneciente al resguardo Nasa, quien fue asesinado en Río Negro, en el occidente del Huila.
De acuerdo con la información entregada por un vocero de la comunidad, sicarios “sacaron armas de corto alcance, las accionaron, pero no les funcionó. De ahí el compañero Jairo pudo escapar hasta la finca de él, pero pues lastimosamente lo persiguieron y llegaron allá y lo ultimaron a tiros, a sangre fría”.
Tras el crimen, los directivos del consejo regional convocaron a una asamblea permanente y estando en el encuentro fueron hostigados.
“La guardia indígena tomó acciones de control territorial y al parecer hay coordinación con el Cauca porque ya por la tarde nos dijeron que del Cauca venían 30 motorizados armados”, aseveró el vocero de la etnia.
Los aborígenes de Íquira, afirman que desde el 2017 han colocado decenas de denuncias y el Estado no ha hecho nada por ayudarlos.