Las autoridades brasileñas informaron que la rotura de una presa que almacenaba residuos minerales del gigante minero Vale, dejó al menos nueve muertos y 300 desaparecidos.
El lamentable suceso ocurrió este viernes 25 de enero, en el municipio de Brumadinho, en el estado Minas Gerais, donde se encuentra una de las represas de Vale en una mina de hierro que se rompió y un río con residuos minerales sepultó las instalaciones de la empresa y diversas viviendas en áreas rurales.
El gobernador del estado, Romeu Zema, señaló que había pocas posibilidades de encontrar más sobrevivientes.
Mientras que el alcalde de Brumadinho, Avimar de Melo Barcelos, indicó que 100 personas que inicialmente fueron reportadas como desaparecidas ya fueron localizadas con vida.
De acuerdo con las declaraciones de la minera Vale, dueña de la represa Córrego do Feijão, manifestó que la mayor parte de desaparecidos, son empleados que se encontraban en el área que resultó afectada por una gran corriente de lodo.